Defensa Civil alertó sobre potenciales incendios en 74 municipios del país por la cantidad de focos de calor. Sectores productivo y ambiental manifestaron preocupación por el temprano inicio de fuego y las condiciones climáticas

20 de junio de 2024, 6:02 AM
20 de junio de 2024, 6:02 AM

“Santa Cruz puede volver a vivir una ‘locura’ nuevamente, si no aprendemos de los errores y los corregimos, evitando el mismo camino recorrido en estos últimos cinco años”, dijo Daniela Justiniano, de la organización Alas Chiquitanas, que desde 2019 apoya a los bomberos con logística para la mitigación y liquidación de los incendios forestales.

Como movimiento ciudadano, dijo que ven con profunda preocupación lo que está sucediendo en diferentes zonas del departamento cruceño, “dan señales que deben llamarnos no solo a la reflexión, sino a tomar acciones inmediatas si queremos evitar una catástrofe”, advirtió.

Justiniano además recordó los datos que acaba de compartir la NASA, y que demuestran que en los últimos 12 meses se alcanzaron máximos récord de temperatura global promedio de manera consecutiva. 

“Esto es una racha sin precedentes en la historia de la humanidad, según científicos del Instituto Goddard de Estudios Espaciales de la NASA, comenzamos a ver que en Santa Cruz ya se tienen indicios preocupantes de esta época seca que comienza”, insistió.

Según la plataforma digital mundial de Greenpeace, que monitorea diariamente los focos de calor, se evidencia que en Bolivia la cantidad se ha elevado al doble, con relación a la media de años anteriores, “dato corroborado también por el Viceministerio de Defensa Civil (VIDECI)”, dijo Justiniano.

Los 2.992 focos de calor detectados en varios municipios del país representan un alto riesgo de incendios, advirtió ayer el viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes.

“En total son 74 municipios los que estarían en riesgo de sufrir algún incendio en caso de que se haga un mal uso de fuego”, alertó sobre poblaciones ubicadas en los departamentos de Santa Cruz, Beni, Pando, Cochabamba, Chuquisaca, Tarija y La Paz.

Calvimontes informó que se emitieron alertas naranja, una por riesgo de incendios, y otra por ráfagas de viento moderado a fuerte en 25 municipios de Santa Cruz. 

Se trata de San Julián, El Torno, Cuatro Cañadas, Montero, San Pedro, Cabezas, La Guardia, y Cotoca, entre otros.

Admitió que es una temporada “crítica” para el departamento de Santa Cruz, y que los vientos pueden alcanzar desde 30 hasta 80 kilómetros por hora.

Sectores
Luis Alberto Alpire, experto el agrometeorología y también productor, manifestó su inquietud por las condiciones climáticas actuales. 

Dijo que las altas temperaturas y fuertes vientos son caldo de cultivo para las llamas, ya que con una sola chispa se pueden generar incendios de magnitud.

Recordó los incendios en Puerto Suárez, en el Parque Nacional Otuquis, y en Puerto Quijarro, pero también la grave sequía que viven las provincias Ángel Sandoval, Velasco y Germán Busch. 

“Hay muy poca precipitación en Ángel Sandoval y en Velasco no llueve desde el 12 de abril. No se puede ocultar una preocupación que también genera Brasil, porque el Pantanal brasileño está ardiendo hace tres semanas, son como 400 mil hectáreas. También hay una línea de fuego de 30 a 40 kilómetros, y en la medida que persista ese incendio, los riesgos son inminentes”, agregó.

Para Alpire, todavía la sequía no se ha agudizado como se espera. Anunció que esto ocurrirá después de un invierno crudo, con las heladas, cuando se secan más el ambiente y el suelo. 

“La sequía será extrema este año por varias razones, se adelantaron los incendios”, indicó.

A esas señales sumó el inicio temprano de los incendios, que por lo general se dan en julio, y ahora ya son noticia desde junio.

“Hay que recordar que también está el tema de la escasez del diésel, que no solo conspira contra el sector productivo, sino que agudizará aún más la época de incendios. La siembra de invierno está prácticamente a paso lento por falta de humedad, pero también por el diésel”, dijo.

Daniela Justiniano recordó que esta carencia de combustible afectó la lucha contra el fuego en Otuquis y lanzó la pregunta a las autoridades, ¿ante la escasez de combustible, cómo se asegurará la provisión para el trabajo de monitoreo y control de guardaparques y bomberos?”.

También alertó sobre las conclusiones de biólogos y expertos en el tema ambiental, que auguran una masiva muerte de fauna, ante eso cuestionó “¿qué acciones inmediatas se tomarán para evitar que muera fauna silvestre por deshidratación en las áreas protegidas?”.

Justiniano dijo que, hasta la fecha, grupos voluntarios como Alas Chiquitanas y otros se organizan para montar bebederos y evitar el sufrimiento y muerte de los animales, pero que esto debe nacer de las autoridades, con planificación.

El biólogo Steffen Reichle manifestó que “personalmente, nunca vio la situación tan grave como este año”, sobre todo en el norte de la Chiquitania y del Pantanal boliviano.

En sus constantes viajes, vio cómo la fauna se  concentra en los cuerpos de agua que van secándose. Para él, mucho de lo que hoy ocurre tiene que ver con la deforestación.

Cree que es un momento crucial y que la gente no termina de entenderlo.

Auguró migración y muerte masiva de los animales si no se adoptan medidas estructurales, incluidas en áreas protegidas.

El fotógrafo de naturaleza y guía turístico ambiental, Alejandro de los Ríos, que se mueve constantemente por las zonas afectadas, captó las escenas de parabas azules y tucanes acercándose a una estancia en San Matías en busca de agua, donde bombean el líquido vital para aprovisionar al ganado y a los demás animales. “Si no hicieran eso, no habría agua”, dijo.

Justiniano volvió a preguntar a las autoridades ¿hasta cuándo se dejará en la impunidad el avance de la deforestación y los desastres causados por quemas ilegales?¿En dónde quedó el pedido de todo un pueblo que desde el 2019 exige la abrogación de las leyes que son parte del problema? ¿Por qué no hay información constante y transparente de la situación y superficie quemada para que la ciudadanía sepa la realidad?", apuntó.

Ruth Alípaz, indígena uchupiamona del norte paceño, admitió que se sienten atemorizados por lo que vivieron el año pasado en su comunidad, San José, ubicada en el Madidi. 

"Lo que se quemó el año pasado, como los árboles del bosque primario, no se ha regenerado como se esparaba porque no hubo mucha lluvia, por el contrario se han secado y eso en época seca estará apenas para una chispa. Y nos ha traumatizado prácticamente el año pasado porque hemos tenido que enfrentar nosotros solos al fuego con nuestros propios medios y recursos. Y hacerlo cada año nos va empobreciendo más y más, y del modo en que se intensifican los incendios cada año, nos asustan los anuncios de que será peor, y que nos rebase en la capacidad de enfrentar esas catástrofes", admitió.

La Asociación Boliviana de Guardaparques y Agentes de Conservación (ABOLAC), dieron a conocer que entre los guardianes de las áreas protegidas también hay inquietud.

"Si en el Madidi, que en teoría tiene un caudal importante de apoyo, se habla de precariedad, es inimaginable lo que podría ocurrir en las demás áreas protegidas. Como ABOLAC, nuestra preocupación es más profunda, tiene que ver con aspectos normativos, debilidad institucional, falta de voluntad política e intereses sectoriales para que se respeten las áreas protegidas, se cumplan las normas ambientales, se prevenga y se sancione penalmente a los responsables", observaron.

Daniela Justiniano lamentó que cuando desde la ABOLAC se alertó sobre lo que acontecía en Otuquis, la medida fue tratar de censurar. "Dieron a entender que estaban exagerando, en vez de movilizarse de forma oportuna", aludió.

DATOS
SEQUÍA
San Javier, San Ignacio, San Miguel y San Rafael padecen por la crisis hídrica, todos de la
Chiquitania, una de las ecorregiones más deforestadas.

NACIONES UNIDAS
“Son ya doce meses consecutivos de los meses más calurosos de la historia (…) Nuestro
planeta está intentando decirnos algo. Pero parece que no escuchamos”, dijo Antonio
Guterres, de la ONU, en el Día
Mundial del Medioambiente.

COMBO INCENDIARIO

La senadora de Comunidad Ciudadana, Cecilia Requena, presentó un proyecto de ley para abrogar el combo incendiario, que debería ser tratado en estos días.